Berlín

Me acuerdo de vos hasta cuando corto un pedazo de pizza,
te siento cuando se enciende el motor de esa camioneta gasolera, que es tu música, solía ser el anuncio de tu llegada,
cuando veo y escucho tu llavero con esa campanita que también anunciaba tu presencia,
veo parte de tu vida en casi cualquier objeto que se me presente ante mis ojos,
me acuerdo de como cocinabas, frases tuyas cotidianas ante cualquier circunstancia... como cuando teníamos que sacar a los perros... siempre te hacías esperar un poquito, o te ponías a calentar el café o te tenias que abrigar mas... mientras los perros se volvían locos,
vos me diste la vida y me la cambiaste,
fuente de amor,
tus manos tan particulares... inolvidables para mi memoria,
tus gritos, tus reproches, tu mirada de bronca a veces, tus nervios, tus cigarrillos, tus pulseritas, tu reloj, tu pelo despeinado y desprolijo, tu sonrisa inolvidable,
tu amor,
tus ganas de jugar, tus ganas de ir a la playa y meterse en el mar,
a favor del robo de bancos sin lesiones,
a favor de beber frio y mear caliente,
aunque ahora no puedas leer esto, te quiero decir que estoy esperando que te despiertes y vuelvas a protegerme,
no se si te vas a ir y olvidarte de mi, dejandome solo y por mi cuenta en este mundo cruel,
tengo entendido que hay unos seres microscopicos que están atentando contra tu vida, son muy pequeños estos seres repulsivos, pero sin embargo pueden matar a cualquiera que esté un poco vulnerable, porque la linea que divide a la vida de la muerte es tan delgada como nuestra piel,
perdón por esta literatura vulgar, aunque si la pudieses leer, estoy seguro que no pensarías que lo es,
¿donde estas? no lo se, en un limbo inexplicable, inentendible y desconocido para los mortales, un lugar donde probablemente la idea que nosotros tenemos sobre el tiempo es absurda,
tu cuerpo respira, pero no me puede acariciar,
tus manos que tantas veces me rascaron la cabeza están inertes,
tus uñas largas,
ya no me hablas mas,
ni me miras,
no se si me escucharas,
pero tu cuerpo parece estar muy indiferente ante mi presencia,
me acuerdo que una vez cuando yo era chico me levantaste la mano y después me pediste perdón, te habrá partido el corazón verme llorar,
ahora ya no me retas si tengo todo desordenado, si dejo todo para mañana...
estas en todos lados,
Te amo Papá